Propuesta por debajo de la mesa
Ven y corta de raíz este miedo
Después de eso, no prometo irme contigo
No es deber, es más bien un reto
Podemos ver si eres capaz de provocarme frío
Desata mis manos y mis piernas
Quizá me volatilice y huya al instante
O puede pasar que me quede para agradecerte
Bien podría darte mi lugar y ahí amarrarte
(podría todo esto ser una trampa para inculparte)
Querido, queda claro que no estás obligado
Pero hay una propuesta sobre la mesa
Por si te llegas a sentir tentado
Pero todo estará en orden
Si es que no te interesa
Con suerte podrías usar mis labios a voluntad
El reto más grande, sin embargo, no es el afecto
Cariño mío, está en la humedad...
Lo mío, como está tu frente al leer este texto
Es un viaje de duración incierta
Si te apresuras aquí me encontrarás
Un minuto puede hacer toda la diferencia
¿Así que cuánto tiempo lo pensarás?
Sello esta carta con mi lengua
Tal cual debe cerrarse una promesa
Haz el favor de no responder en jerga romántica
Sino en la que se usa por debajo de la mesa