¿qué cargas en tu diario?
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–¿Qué cargas ?, ¿qué escondes bajo los zapatos?... ¿qué historias me contarían tus huellas?, ¿qué cosas has dejado atrás sin mirar o sin darte cuenta?...
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–Muy poco en realidad, mi diario está casi en blanco, aun así, mis botas están desgastadas, mis ropas rasgadas y mis manos ásperas
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–Debo confesar que he leído tu diario, es muy triste si se le pone atención...
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–Así que triste, justamente eso
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–No triste por patético, sino por breve
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–No triste por breve, sino por discreto
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–No triste por discreto, sino por temeroso
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–Así que temeroso, justamente eso
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–No temeroso por marica, sino por inseguro
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–No temeroso por inseguro, sino por débil
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–No temeroso por débil, sino por cobarde
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–Así que cobarde, justamente eso
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–No cobarde por el miedo, sino por desconfiado
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–No cobarde por desconfiado, sino por precavido
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–No cobarde por precavido, sino por abatido
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–Así que abatido, justamente eso
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–Justamente eso